Cada una de las letras que componen tu nombre, oh Belleza, en el cuadro de honor de los suplicios, desposa la llana simplicidad del sol, se inscribe en la frase gigante que cierra el cielo, y se asocia al hombre encarnizado en engañar a su destino con su contrario indomable: la esperanza.
jueves, 23 de enero de 2020
La rosa de roble de René Char
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Extravío
Mariana me pegó una cachetada que me voló los lentes de un lado de la habitación hacia el otro. Los demás presentes en la habitación, Pablo ...
-
Eran casi las 3 de la mañana y yo seguía resumiendo y repasando en voz alta mirando al espejo para la evaluación de derecho social que tení...
-
No escribo como hablo, no hablo como pienso, no pienso como debería pensar, y así sucesivamente hasta las más profundas tinieblas.
-
Cada una de las letras que componen tu nombre, oh Belleza, en el cuadro de honor de los suplicios, desposa la llana simplicidad del sol,...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario